Es llamativa la
dificultad en Madrid para acercarse y fotografiarse junto a los monumentos más
distintivos de la ciudad. La fuente de Cibeles se aísla del peatón-turista por cinco
carriles de tráfico rodado. Uno de los emblemas de Madrid está en medio de una
rotonda de imposible acceso hasta para los más intrépidos.
La Puerta de
Alcalá es otro de los íconos madrileños que el turista se tiene que conformar
con ver de lejos. Ahí está, ahí está…
Estos dos monumentos
que otrora fueron símbolos gráficos de toda la ciudad habría que agregar otras
construcciones monumentales como el Monumento a Colón (Plaza Colón), el Arco de
la Victoria (Moncloa), la Puerta de Toledo, la fuente de Neptuno y el Monumento
a Calvo Sotelo (Plaza de Castilla).
En la era de la
imagen, de los teléfonos inteligentes y de las redes sociales es inconcebible
que no se hayan realizado las mínimas reformas para que estos monumentos sean
accesibles. Con ello, se incrementaría su presencia en las redes sociales y en
internet en general, generando una promoción gratuita de valor incalculable.
Solo al alcance de campeones
Su ubicación original se entraba muy cerca de la actual Casa de América. Desde su puesta en funcionamiento en 1792 hasta 1862 decenas de aguadores se acercaban a ella para proveerse de agua.
El ayuntamiento de Madrid decidió en 1895 reubicarla en el centro de la plaza que se empezaba a ampliar con los magníficos edificios del Banco de España, de Correos y de Linares. Ese mudanza generó mucha polémica en la prensa, pero no se llegó a comprender la magnitud del cambio: ese desplazamiento de apenas unos 20 metros determinó su triste aislamiento. La diosa Cibeles está ahora solo al alcance de alguna estrella madridista.
Como huyendo de Madrid
me colocan…¡Habrá ingratos!
el ilustre municipio, tal vez de mí enamorado,
no quiere que por más tiempo
le dé la cara a los galos.
…
“¡Obras son amores!...”grita
el municipio muy alto…
(José
Jackson Veyán)
El monumento a
Colón
Cuando se
inauguró en 1892 estaba situado en el centro de la plaza de Colón que
era una zona ajardinada de forma ovalada en medio del Paseo de Recoletos.
Posteriormente fue trasladado a los Jardines del Descubrimiento construido sobre el solar de la antigua Casa de la Moneda. El monumento a Colón fue ubicado
en la esquina de la plaza que linda con la calle Jorge Juan y Paseo de Recoletos y fue disfrutado de cerca desde el día de la inauguración en 1977.
En el año 2009, de
acuerdo al plan urbanístico Eje Prado-Recoletos ejecutado bajo la alcaldía de
Alberto Ruiz-Gallardón, Colón fue desplazado a su actual ubicación, que es la
que tuvo desde el año 1892 hasta 1972, pero despojado de su espacio ajardinado.
Preside otra vez la unión del Paseo de la Castellana con el de Recoletos: Aislado
de los madrileños de a pie, Colón se ha convertido en una monumental rotonda.
@gustavojaviervazquezalvarez